04 julio 2010

Fiestas sí, política no; No te jode.

Hoy nuestra alcaldesa y sin embargo enemiga se ha apropiado de la plaza de todos los pamploneses para un acto "público". Resulta que a través de una pantalla gigante (gigante para mi salón, pequeña para la Plaza del Castillo) se ha ofrecido el partido de la selección ejpañola. Supongo que el acto se habrá encuadrado dentro de la celebración de la candidatura a la capitalidad cultural europea, ya que cultura había mucha. Mejor dicho, había multiculturalidad. Vamos, que principalmente había ecuatorianos, colombianos, mexicanos, argentinos, guatemaltecos, rumanos, rusos y ejpañoles. Lo de ejpañoles lo digo con seguridad, porque conozco a varios mendigos que frecuentan la plaza de todos los pamploneses, y doy fe de que son ejpañoles. Y allí estaban, con su inseparable y siempre leal brik de Viña Carrión.
El caso es que tras otro tostón y otro triunfo de rebote de "la roja" (¿jugarán así contra Alemania?), la plaza no se ha despejado, porque después de este acto había concierto (sí, sí, así han llamado a lo que ha sucedido después).
El público ha ido cambiando y donde antes había olmecas y toltecas barrigudos y borrachos, vestidos a lo Eminem, se han ido ubicando ruidosas púberes flacas como espaguetis y con el pelo negro, largo y lacio, esperando para ver a alguien (me dá nosequé llamarles "sus ídolos").
Primero ha salido una señorita que ha cantado varias canciones de esas que cantan en Operación Triunfo. Tras menos de una hora torturando a los presentes se ha despedido con un "Gabón Pamplona" y un "Viva San Fermín". Hay que ser "educao".
Después ha salido un grupo llamado "Melocos", que al parecer hay quien los conoce. Los muchachos son del Puerto de San Lorenzo, Cádiz. Bien, ahora ya podemos decir que si bien en el Puerto pastan buenos toros y se crían buenos toreros, con la música no sucede igual. Malos, malos, malos.
Malos.
El caso es que han acabado cantando "Villa maravilla" durante varios minutos (los que les ha costado a las quinceañeras botarates enterarse de qué estaba diciendo el cantante, y empezar a corear), y después han gritado ejpaña, ejpaña, ejpaña, como si estuviera en un estadio ejpañol. En este momento las botarates se han aburrido y han empezado a abandonar sus localidades, supongo que seguras de que el corto repertorio de "Melocos" había llegado a su fin, tras haber incluido varios exitos ochenteros ajenos (y no de Kortatu o La Polla precisamente).
El caso es que ahora entiendo porqué en este año de recortes, durante los sanfermines va a haber más pantallas gigantes que otros años por la ciudad. Pretenden que en ejpaña y el resto del mundo vean imágenes de pamploneses (gente de cualquier lugar vestida de blanco y rojo) celebrando éxitos de la selección ejpañola, aprovechando que esos días pamplona estará a reventar de gente dispuesta a celebrar el peinado de la duquesa de alba, si se tercia.
En fin, menos mal que Alemania parece superior a todos los demás.

Y no penséis que lo digo con mala leche, que yo siempre he sido de "la roja".





4 comentarios:

Anónimo dijo...

miedito me da una salida de peñas directa a la plaza del castillo mientras se está retransmitiendo en esas pantallas el partido de semifinal... alemanes, olmecas, toltecas y... vascos... todos borrachos. menudo mejunje!

Anónimo dijo...

He aqui el testimonio de un navarro dando fe en el foro de Diario de Noticias de sus sensaciones al ganar Espana (uy perdon el Estado Espanol la Eurocopa). Define muy bien el espiritu cerril, castrado y aldeano que se vive en esa ciudad con respecto a los temas "politicos" (de sentido comun mas bien diria yo):

"por Santi » Mié Jul 02, 2008 4:16 am

A mí evidentemente me alegra más un éxito de Osasuna que uno de la selección, sin duda. Por un título de Osasuna no sé qué sería capaz de hacer. Pero eso no quita para que me alegre, y mucho, con el triunfo de la selección. Me parece perfecto que haya gente que no se alegre, pero me resulta sospechoso que esa gente necesite demostrar que no se alegra. Mala señal. Y más todavía cuando encima necesitan faltar al respeto a los demás para demostrar su "antiespañolismo" con sello de calidad. En fin, yo hace tiempo que superé los complejos políticos y aunque el españolismo rancio y casposo me aterra (me imagino que como a Xavi, Puyol o Xabi Alonso, por ejemplo), es inevitable sentir algo cuando ves en una final a once hombres entrelazados por el hombro escuchando el himno, once hombres que se han criado cerca de ti, en ciudades que conoces, junto a gente que conoces, hablando el mismo idioma que conoces, jugando en los campos que conoces... En fin gente como tu o como yo que, aunque no lo sepa, está representando a un país que ha estado sumido en el túnel de la historia durante muchos años y que ahora asoma la cabeza para ofrecer al mundo lo mejor de sí mismo en el deporte, en la música, en la pintura, en la literatura, en la economía... Un país en peligro de ruina que ha sabido levantarse. En fin, supongo que a todo esto que estoy contando se le pueden poner peros y matices, yo mismo podría ponerlos, pero lo cierto es que es mi idea general y cuando ganamos la Eurocopa el domingo a mí se me venían a la cabeza tantos y tantos momentos negros en la historia, tantas rencillas superadas por un tsunami de alegría increíble que me alegré y mucho. Y si digo la verdad, no salí a la calle a celebrarlo porque en esta ciudad los extremos nos atenazan y si sales a celebrar un triunfo de la selección te juntas con cierta gente con la que no deseas juntarte y eres señalado por otra gente que te prejuzga sin hacerse una sola pregunta al respecto. Triste pero cierto. Es la crónica de una ciudad donde cualquier cosa tiene que ser discutida, cualquier idea descalificada, cualquier sentimiento menospreciado, donde el sentido común es casi siempre el menos común de los sentidos. Así que lo celebré en la intimidad, y sí, me alegré probablemente más de lo que yo mismo pensaba.

P.D: Lo de los cubatas en vaso de tubo es indignante. Cada vez quedan menos ciudades en las que te puedas echar un cubata en condiciones. ¿A nadie se le ocurre que en un vaso con un 80% de alcohol y un 20% de refresco es imposible saborear nada? En fin, que si hay que recoger firmas me uno.

Casto López Armada dijo...

No sé qué tiene que ver este testimonio tan políticamente correcto y poco sincero con nada de lo que yo haya dicho nunca.
Simplemente, yo desde luego "siento" cosas muy distintas a las que "siente" este caballero.

Anónimo dijo...

...no en vano hasta te sientes orgulloso de vivir en una ciudad tan aldeana y preocupada del qué dirán como Iruña.